En un mundo donde las incertidumbres son frecuentes y por momentos se convierten en obstáculos que sortear, la videncia se presenta como una salida. Muchos reconocen en las videntes una especie de guía espiritual que les permite encontrar respuestas.
¿Qué es la videncia?
Es la capacidad de visualizar aquello imperceptible al ojo de los demás. La clarividencia existe desde el inicio de la humanidad y permite predecir el futuro. A esta posibilidad de ver más allá se le suma la facultad de interpretar con agudeza mental todas las señales.
La videncia es un don que las ciertas personas poseen desde nacimiento. Con el paso del tiempo esta se profundiza y complementa con otras técnicas como la lectura del Tarot. Un claro ejemplo, es el de la tarotista que acierta y es recomendada por todos.
¿Para qué me sirve la videncia?
Las videntes leen el pasado, el presente y el futuro. Hay quienes creen que no tiene gran sentido que le hablen sobre hechos ya sucedidos. Sin embargo, todo tiene un por qué. La videncia sobre acontecimientos pasados le permite a las profesionales serias hacer una interpretación del presente y del futuro más acertadas. Es esa parte que completa la biografía, las experiencias y el alma de los clientes.
Es común que los humanos corrientes tengan algún resquemor a consultar videntes. Pero, está demostrado que una vez que lo hacen no se arrepienten, sino por el contrario, lo recomiendan. Una consulta con una vidente te sirve para:
- Lograr un equilibrio emocional en momentos de crisis
- Encontrar respuestas a esos interrogantes que interrumpen tu tranquilidad
- Recibir ayuda objetiva y sincera para tomar decisiones en tu vida
- Prepararte para acontecimientos que no tenías previstos, pero la vidente puede detectar que sucederán
- Tomar decisiones con seguridad
- Tener una consejera dispuesta a escuchar en cualquier ocasión sin prejuicios
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